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Amar su venida.

Para entender el tema de esta nueva clase nos enfocaremos enĀ  el significado de amar, tanto en el sentido natural, como en el Amar conforme a las Escrituras.
AMAR:
En el sentido natural, es tener un afecto, un querer, un aprecio o estima hacia una persona, animal o cosa.

Amor y Amar

Amor y Amar, conforme a las Escrituras lo podemos entender como lo define 1 Juan 4:10, “En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Ć©l nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestro pecados”
La propiciación se refiere a la mitigación de la ira de Dios mediante el sacrificio de Jesús, lo cual satisface la justicia de Dios y da como resultado Su disposición favorable hacia nosotros.
Dios Padre nos enseña en que consiste el amor y con su ejemplo lo demuestra cuando envía a Jesús su Hijo como sacrificio, activando su piedad y misericordia para la humanidad.
El apóstol Juan expresa que nosotros no amamos a Dios, sino que Dios nos amó primero y por eso le amamos. “Nosotros le amamos a Ć©l, porque Ć©l nos amó primero”Ā  1 Juan 4:19
Amar, es el primer gran  mandamiento dado por JehovÔ Dios a Moisés para que le enseñara al pueblo, despues de haberle mostrado una poderosa manifestacion de Su amor, al sacarlos de la esclavitud en Egipto, descrito en Deuteronomio 6.5,  y Jesús lo confirmo, quedando escrito en Mateo 22:37-39
ā€œAmarĆ”s al SeƱor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma y con toda tu mente. ā€œĆ‰ste es el primero y grande mandamiento. ā€œY el segundo es semejante a Ć©ste: AmarĆ”s a tu prójimo como a ti mismoā€Ā 
Recordemos que los mandamientos que Dios da, no son negociables, inciden en la salvación y deben ser practicados; en este caso, este mandamiento del cual estamos hablando debe ser practicado primero para con Dios y después para con el prójimo.
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Amar su venida

Amar su venida, que es el tema al que nos referiremos en esta clase, tiene que ver con el amar a Jesús, ya que él serÔ enviado por el Padre para arrebatar su Iglesia.  Al amar la venida de Jesus, también estamos amando todas las instrucciones y enseñanzas que él dejó como advertencia a su pueblo para que podamos estar preparados para el arrebatamiento.
La instrucciónĀ  que Jesus dio, fue la acción de enseƱar, formar, capacitar, adiestrar, para que alcanzaramos sabidurĆ­a, Ā como lo dice Proverbios 12:1 “el que ama la instrucción ama la sabidurĆ­a”, Ā JesĆŗs y el Padre dejaron instruccion, ya que ellos querĆ­an que nosotros como su pueblo fueramos sabios y entendidos, para mostrar las buenas obras de Jesus en nuestras vidas, Ā (Santiago 3:13)Ā 
Amar su venida, es amar la sabidurĆ­a, que segĆŗn las Escrituras tambiĆ©n tiene que ver con el temor de JehovĆ”,Ā  como lo dice la Escritura enĀ  Proverbios 1:7Ā  El principio de la sabidurĆ­a es el temor de JehovĆ”;. Los insensatos desprecian la sabidurĆ­a y la enseƱanza”Ā  , y el significado de temer a JehovĆ” segĆŗn (Proverbios 8:13) es:Ā 
  • Aborrecer el malĀ 
  • Aborrecer la soberbia
  • Aborrecer la arrogancia
  • Aborrecer el mal camino y
  • Aborrecer la boca perversa, de la misma manera que Dios las aborrece.
Estas acciones y conductas Jesús nunca las practico y ademas exhortó que no estuvieran en nosotros, al contrario de estas cosas Jesus:
  • Amo el bien,
  • Amo la humildad,
  • Amo la sencillez,
  • Amo el camino recto,
  • Amo las palabras puras, fue limpio de labios y puro de corazon.
    • Jesus fue un gran ejemplo de Santidad, con el proposito de alcanzar para el y para nosotros, el Reino de los Cielos y la Vida Eterna, que es a donde quiere que estemos con el.
Para aquella persona que no ama la venida de JesĆŗs, la Escritura dice queĀ Ā  ā€œEl que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amorā€ Ā 1 Juan 4:8
Para poder a amar la venida de JesĆŗs y todas la manifestaciones del cielo, es necesario conocer a Dios para desear la vida eterna como lo dice la escritura enĀ  Juan 17:3,Ā  ā€œY esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el Ćŗnico Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.ā€
Si no conocemos a Dios y a Jesús conforme a las Escrituras y si no tenemos una relación íntima con el Padre, con nuestro Señor Jesucristo y con el Santo Espíritu de Dios, en fe, santidad y amor, serÔ muy difícil recibir las promesas del cielo, la salvación y la vida eterna.

¿ Cómo amar su venida?

Para amar la venida de JesĆŗs, como creyentes debemos tener en cuenta estos consejos:
Adentremonos en el estudio de las Escrituras como exhorto Jesus a que se hiciera;Ā  “EscudriƱad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenĆ©is la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mĆ­;”Ā  Juan 5:39, si las Escrituras dan testimonio de el, necesitamosĀ  conocer a:
1.        Jesús prometido, descrito desde el libro del Génesis hasta Malaquías, que nos muestra el propósito por el cual el escogido de Dios, la raíz de David, debía venir al mundo.
2.      Aprendamos del hombre Jesús, venido en carne, manifestado desde su nacimiento, vida, obra, padecimientos, muerte y resurrección, descrito en los cuatro Evangelios.
Tengamos en cuenta la exhortacion que encontramos en 1 Juan 4:2-3Ā  En esto conoced el EspĆ­ritu de Dios: Todo espĆ­ritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios;Ā y todo espĆ­ritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y este es el espĆ­ritu del anticristo, el cual vosotros habĆ©is oĆ­do que viene, y que ahora ya estĆ” en el mundo.”
3.      Aprendamos de Jesús glorificado, descrito desde los Hechos de los apóstoles, hasta el Apocalipsis de Juan, que da testimonio de todo lo que alcanzó y recuperó Jesús en su cuerpo de carne como pago para el rescate por todos nosotros, fue levantado por el Padre de entre los muertos y tranformado como primicia de los que mueren, para poder ir al cielo.
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Para poder llegar a amar a alguien, es necesario primero conocer a esa persona, pasar tiempo con ella para que se cree un vĆ­nculo de amistad, conocimiento, confianza, lealtad, respeto e intimidad, el cual lograrĆ” manifestar un verdadero amor. De esta manera es la relación que se debe crear con Dios Padre y JesĆŗs, una unidad perfecta. ā€œLa gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, asĆ­ como nosotros somos uno.Ā  Yo en ellos, y tĆŗ en mĆ­, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tĆŗ me enviaste, y que los has amado a ellos como tambiĆ©n a mĆ­ me has amado.ā€ Juan 17:22-23
El mismo JesĆŗs dio el ejemplo de intimidad, confianza, respeto, obediencia, sujeción y amor al Padre, pues como el mismo dijo: ā€œPorque yo no he hablado por mi propia cuenta; el Padre que me envió, Ć©l me dio mandamiento de lo que he de decir, y de lo que he de hablar. Y sĆ© que su mandamiento es vida eterna. AsĆ­ pues, lo que yo hablo, lo hablo como el Padre me lo ha dicho.ā€Ā  Juan 12:49-50
Jesus amo esperar en el Padre todo lo que tenia que hacer, para dar vida eterna.
Asi que hermanos amados, que podamos decir como dijo Jesus:
“Estas cosas habló JesĆŗs, y levantando los ojos al cielo, dijo: Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que tambiĆ©n tu Hijo te glorifique a ti;Ā como le has dado potestad sobre toda carne, para que dĆ© vida eterna a todos los que le diste.Ā Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el Ćŗnico Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.Ā Yo te he glorificado en la tierra; he acabado la obra que me diste que hiciese.Ā Ahora pues, Padre, glorifĆ­came tĆŗ al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo fuese”.Ā  Juan 17:1-5
“Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo estoy, tambiĆ©n ellos estĆ©n conmigo, para que vean mi gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la fundación del mundo.Ā Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te he conocido (intimidad),Ā y estos han conocido que tĆŗ me enviaste. Ā Y les he dado a conocer tu nombre, y lo darĆ© a conocer aĆŗn, para que el amor con que me has amado, estĆ© en ellos, y yo en ellos.”Ā  Juan 17:24-26
Si el nos ha amado y nos ha dado junto con el todas las cosas que aprendio y recibio del Padre, ĀæPor que no estamos amando su venida?
Prestemos atencion! y que logremos como el apostol Pablo declaro para el y para nosotros..Ā 
“He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Ā Por lo demĆ”s, me estĆ” guardada la corona de justicia, la cual me darĆ” el SeƱor, juez justo, en aquel dĆ­a; y no solo a mĆ­, sino tambiĆ©n a todos los que aman su venida.” 2 Timoteo 4:7-9

Gracias por estar con nosotros

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Ā” Dios le bendiga !

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